miércoles, 24 de diciembre de 2008

Literatura suelta 5

Feliz Navidad a todos.
Cambiando de tema, aquí les pongo un cuento de Augusto Monterroso, a ver qué les parece.

La oveja negra.

En un lejano país existió hace muchos años una Oveja negra.
Fue fusilada.
Un siglo después, el rebaño, arrepentido, le levantó una estatua ecuestre que quedó muy bien en el parque.
Así, en lo sucesivo, cada vez que aparecían ovejas negras eran rápidamente pasadas por las armas para que las futuras generaciones de ovejas comunes y corrientes pudieran ejercitarse también en la escultura.

1 comentario:

Guapóloga dijo...

Si esto es profético, me deja poco tiempo de vida... Soy bastante mala artista :S